Olvido

domingo, 27 de abril de 2008



...Todo puede ser aveces tan rápido, pero a la vez no nos damos cuenta de la brevedad del tiempo...



No puede ser posible esta alteración mínima de nuestras vidas que perjudique la relación de nuestro cuerpo con el entorno, vemos pasar el tiempo como un reloj enorme que sólo marca tus propios tiempos, tus horas, minutos y segundos que suelen llegar a recordarte cosas por hacer...

Que muchas veces hacer por deber, porque la vida te impone vivir y seguir su mandato.

... El tiempo que procuramos medir, no tiene medición, sólo transcurre, avanza y no deja de avanzar...

Hasta que un día... todo puede ser diferente... porque no sólo olvidarás todo aquello que tanto viviste, sino también hasta de lo que deseabas vivir y nunca tuviste la oportunidad de obtenerlo. Ahora el tiempo dispone por ti, quizás como siempre, o bien de una forma desconcertada que ni tú mismo sabrás quién diablos eres.

...Aún más, el tiempo ni siquiera pide su espacio para indagar por tu vida, sólo llega, al igual que la muerte, llega y no puedes hacer nada para cambiar lo ocurrido... nadie se da cuenta, aprovecha tu tiempo, no desgastes en malos momentos, olvidalo y sigue por donde todos quieren caminar sin paso atrás...

Tu Vida...


ya que el tiempo no espera... y llega.







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